Normalmente hay motivos que nos limitan para vivir bien física y emocionalmente. Si realizamos un examen de conciencia nos daremos cuenta que nuestras creencias son la principal barrera o motivación para hacer o no las cosas que nos proporcionarán bienestar.
Las creencias son parte de la personalidad individual y caracterizan también a un grupo o sociedad que las comparte. También se dice que es una certeza, “ver para creer”, sin embargo, las creencias generalmente son inconscientes, se han formado durante toda la vida.¿Por qué decimos que las creencias pueden actuar como barreras que limitan tu bienestar? Cuando vives con una condición crónica como diabetes, generalmente ya tienes una idea de lo que eso significa, porque has visto familiares o conocidos con esa misma condición. Si viste a alguien que no le fue bien con su diabetes crees que a ti te pasará lo mismo, o si has visto a alguien que le vaya bien, pues también crees que no pasa nada con la enfermedad. Pero cuando hay que cambiar los pensamientos para modificar tu actuar comienzan los problemas.
Primero hay que identificar la creencia que no te funciona. Para identificarla necesitas reflexionar, por ejemplo: te das cuenta que tus ingresos económicos no son suficientes, hay que identificar cuál es tu idea acerca del dinero. Te acuerdas cuando eras niño, tus padres pudieron haber comentado que el dinero era sucio, que te lavaras las manos después de tocarlo, que la gente rica era deshonesta, que seguramente había robado el dinero y por eso tenía. Con el tiempo te das cuenta que no tienes los ingresos que deseas, la razón es porque la idea que tienes acerca del dinero es predominantemente negativa, tu inconsciente no te permite tener más dinero, pues serías como la gente rica de la que hablaban tus padres y eso no es lo que realmente quieres.
Con la diabetes no es muy distinto, hay que identificar cuál es tu idea inconsciente acerca de la diabetes. Primero, si crees que la diabetes es una enfermedad mortal, vendrá un estado de desánimo y tristeza, lo que se traduce en no querer hacer nada pues tu vida “terminó”, ya que ahora tienes diabetes. De ahí viene ese dicho popular “de algo me he de morir” y te das por vencido, sin embargo, te das cuenta de que sólo es una creencia y sólo está en el pensamiento. La buena noticia es que los pensamientos tú los puedes modificar. La clave es practicar el ¡pensamiento positivo! Esto te dará ánimos para realizar acciones saludables. En la actualidad, vivir con diabetes no es el fin del mundo, sólo te pide vivir teniendo pensamientos positivos y acciones saludables (comer balanceado, realizar ejercicio físico, mejorar tus relaciones interpersonales).
La negación es parte de un proceso de duelo cuando perdemos algo, en este caso, la salud, sin embargo, cuando reflexionas e identificas tus creencias, esta negación se cancela automáticamente, porque aceptar que vives con una condición diferente en la actualidad, será mucho mejor que andar evitándola o negándola. Afrontar tu realidad es una muestra de la fortaleza que tenemos todos los seres humanos.
La apatía (actitud, flojera) es una parte de la negación, es un mecanismo de defensa que funciona en un principio, te mantiene a “flote” mientras encuentras qué hacer. Si esto dura mucho tiempo ¡cuidado! Tu inconsciente está jugando contigo, reflexiona y sé sincero.
El miedo es una de las actitudes que pueden sabotearte, sin embargo, volvemos a decirte que sólo es un pensamiento y lo puedes cambiar. El miedo es un mecanismo de supervivencia; cuando sabes que algo malo te puede pasar, no lo haces. Por ejemplo: antes de cruzar una avenida muy transitada te detienes y volteas a los lados para ver que no venga carro, ya que te puede atropellar y morir. El miedo no es malo, te puede salvar la vida, sin embargo, el miedo también paraliza. ¿A qué nos referimos? Cuando eres presa de éste, no te permite salir y experimentar, ver con tus propios ojos que tal vez sí se puede. Piensa: ¿qué es lo peor que puede pasar? …
El desconocimiento es una barrera muy poderosa, desafortunadamente muchas personas se dejan llevar por comentarios de otras personas que no son ciertos o que no están avalados científicamente. Por lo que te sugerimos acudir con profesionales que se dediquen a atender personas con diabetes y pregunta y despeja tus dudas.
Las barreras que limitan tu bienestar generalmente están en tu mente, modifica tu pensamiento limitante y experimenta un sentimiento positivo que genere una acción saludable.